¿Qué piensas que pueden aportar las nuevas tecnologías a la enseñanza de lenguas? ¿Por qué?

¿Qué clase imaginamos cuando estudiamos una lengua extranjera? Traducimos como si fuéramos escríbanos de un tiempo pasado, palabra por palabra, o navegamos directamente en internet utilizando el traductor de Google. Rellenamos huecos y huecos de ejercicios, de transformación de palabras, o utilizamos la lengua para comunicarnos y dejamos de un lado la gramática. Las nuevas tecnologías parecen ser el mesías que nos salvará de ese eterno aprendizaje formal y aburrido, que es dominar una lengua extranjera. 

En cierta manera, es la historia de dos mundos contrapuestos pero vigentes en nuestro siglo. Internet y su aparición ha dibujado un nuevo mundo de posibilidades ante nosotros, no sólo como un lugar donde acceder a buscar información que antes sólo estaba en manos de unos pocos, o estaba ubicada en ciertos lugares como las bibliotecas. Ahora las nuevas tecnologías nos abren un abanico de posibilidades donde el alumno no sólo tiene acceso a la información, sino que dispone de tantas herramientas como quiera para aprender en la red, conectado desde donde esté, en cualquier lugar del mundo. Es a sí mismo coautor y creador de nueva información.  

Esta capacidad que tienen las nuevas tecnologías de la información o las TIC, pudiera parecer en un primer momento la solución a los problemas de aprendizaje existentes en la escuela formal y en otros ámbitos de estudio. Sin embargo, pienso que las nuevas tecnologías por sí mismas no aportarán esos resultados tan esperados, a menos que logren ser utilizadas de manera lógica y sensata. En cierta manera es cómo un equipo de estrellas que juegan cada cuál a su manera por el campo de la enseñanza de lenguas. Pienso que lo más destacable que aportan es su carácter innovador, y la capacidad que tienen para motivar a un alumnado que cada vez necesita estímulos más potentes para ser movilizados. De alguna manera gracias a ellas, las tareas se vuelven menos monótonas, son más atractivas y atraen más la atención de nuestros alumnos. Pueden aportar muchísimas ventajas, desde facilitar el aprendizaje, disminuir el material físico que se requiere, generar aulas virtuales fuera de clase, mejorar la pronunciación de los alumnos con aplicaciones destinadas a tal fin, ofrecer ejercicios de soporte con las claves de la corrección. Sus ventajas son muy importantes, puesto que hoy no es que vayamos a conectarnos a internet, es que vivimos permanentemente conectados. 

Frente a ese mundo de posibilidades que las TIC pueden ofrecernos en la enseñanza de idiomas, también se abre un mundo de dispersión, de ventanas abiertas que la misma red ofrece, y donde el alumno tiene dificultad en digerir y asimilar tal cantidad de información que le ofrece la red. Las nuevas tecnologías no pueden excluir o suplantar la figura del profesor,  ni la capacidad de éste para detectar que problemas está teniendo el alumno en su aprendizaje. 

Como conclusión, diría que la nuevas tecnologías pueden aportar muchas ventajas a la enseñanza de lenguas, pero necesitan tener una cierta conexión entre ellas, para no caer en un bosque si fin de aplicaciones, o en el usar por usar, porque es divertido, porque es una manera de atraer al alumno hacia unos contenidos de lengua. Pienso que si se utilizan con sensatez y con un cierto rigor, pueden aportar muchísimo a la enseñanza de lenguas.